prueba con biophalt

Los desafíos ambientales actuales imponen al sector de la construcción de carreteras un doble imperativo: el de reducir su consumo de materias primas no renovables y limitar sus impactos de «carbono». En el marco de este contexto, el Grupo Eiffage ha desarrollado una gama de ligantes de base vegetal, compatibles con la reutilización a alta tasa de material procedente del fresado de pavimentos antiguos, contribuyendo así a una economía circular baja en emisiones de CO2.

La gama vegetal de ligantes del grupo Eiffage es el fruto de una innovación continua desde la década de 1990: se empezó elaborando fluxantes vegetales para el betún, se siguió con el desarrollo de una emulsión vegetal para la producción de aglomerados en frío y reciclados in situ de pavimentos envejecidos y se ha culminado ahora con la obtención de un ligante de origen vegetal denominado BIOPHALT®, que puede ser empleado para fabricar asfalto para todas las categorías de tráfico, incluidas las autopistas.

Este ligante BIOPHALT ® se fabrica a partir de residuos de celulosa de la industria papelera y es el primer ligante etiquetado como “Producto de base biológica” y sumidero de carbono.

BIOPHALT® ha sido evaluado técnicamente dentro del proyecto BIOREPAV, que ha contado con el apoyo de ACCIÓ y de la Agencia de Residuos de Cataluña. En este proyecto se han desarrollado mezclas semicalientes, fabricadas entre 30 y 40 grados menos que una mezcla convencional, con un 40% de asfalto recuperado procedente del fresado de firmes viejos y en las que el 100% del ligante nuevo de aportación ha sido el ligante vegetal BIOPHALT.

Gracias al apoyo de la Diputación de Tarragona, la mezcla BIOPHALT® se va a probar en un tramo de 300 metros en la carretera T-240 con el objetivo de proporcionar una solución viaria sostenible. Con la mezcla BIOPHALT® colocada en esa carretera se van a compensar 19,5 toneladas de CO2, lo que supone una reducción de las emisiones de un 130% con respecto al mismo tramo realizado con una mezcla con betún convencional derivado del petróleo. Además, al emplear un 40% de fresado, se van a ahorrar 116 toneladas de áridos vírgenes.

Por tanto, el empleo de mezclas BIOPHALT® en la construcción y conservación de carreteras permite realizar obras neutras en carbono, ya que se compensan las emisiones de CO2 generadas en la fabricación, transporte y puesta en obra de la mezcla. Y además se contribuye a la economía circular al reutilizar una parte importante del material existente en la carretera.